Eh! Aquí en el asiento fiel a la derecha del viento
Queriendo acariciar tu rostro,
aquí en el silencio.
Lejano porque hoy estas en el
cielo distante
Yo, acongojante y enloquecido
por encontrarte
La mirada se hace cegadora
frente a un mar de almas que lloran
Tú, donde la calma por fin
brota, ven hacia mi.
Gran princesa soñadora. Presa
de amor por mis pupilas
Que se dilatan al verte tan
cercana en mi amanecida
Vuelve silueta de placer dentro
de mi agonía
Haz que todo sea como el color
de tus mejillas
Vuelve una vez más y acaricia
mi brillo alborotante
Con gran sed de alcanzarte y
una vez más besarte
Cae en mis brazos para tomarte
en ellos amarrarte
Destila tu preciosa piel sobre
mi estruendo de hombre
Sobre el cual tú has dibujado
un hermoso cuadro
Pintando el lienzo de mi hambre
por ti, soñadora.
Quiero verme quemando el sol de
tus encantos
Quiero ser la última mordida de
tu voraz madrugada.
Déjame ser la saciedad
infinita, esa que tu tanto amas.